La edición de Gran Hermano VIP quedará para el recuerdo, pues la cantidad de traiciones que se están llevando a cabo son incontables. Kiko Jiménez y Estela Grande han sobrepasado los límites, más de lo que se podía esperar. Cuando Kiko Jiménez entró a la casa de Gran Hermano VIP 7, lo hizo muy ilusionado, y en teoría, enamorado hasta las trancas de Sofía Suescun. Según él, ella es el amor de su vida, y ambos estaban predestinados desde hacía muchos años. Pero toda esa habladuría le ha durado menos de tres semanas, que es lo que lleva el concurso en antena. Kiko Jiménez estaba siendo el gran olvidado, debido a que Hugo se llevaba todo el protagonismo. Es entonces cuando el chico de Suescun traicionó a Mila Ximénez, como acto de venganza por un suceso cometido fuera de la casa de Guadalix de la Sierra. Pero si hay algo por lo que las cámaras le sigan más de lo normal, es por su relación con Estela Grande, la mujer de Diego Matamoros. Kiko Jiménez cruza los límites "Echo de menos el calor humano al dormir", le comentaba Kiko Jiménez ha Estela Grande. Es entonces cuando ella decidió meterse en su cama, aunque solo para dormir. Pero al día siguiente, esta advirtió que no había podido dormir nada, y habido sido la culpa de él. ¿Qué pasó bajo el edredón? Cuando sus respectivas parejas vieron las imágenes, no podían creerlo. Diego Matamoros prácticamente ha anunciado su divorcio, y Sofía Suescun no sabe ni donde meter la cabeza. Cuando parecía que las cosas no podían seguir empeorando, Estela Grande dijo lo impensable. "Me gustaría una hora de intimidad sin saber que estoy siendo grabada, escuchada… Una hora de intimidad de verdad". Esto dejó en shock a la audiencia, pues parece ser que ante la afirmativa de Kiko Jiménez, ambos pretenden pedir una hora sin cámaras, en un futuro no muy lejano.