La boda de María Patiño y Ricardo Rodriguez no deja de dar que hablar y es que la sorpresa ha sido tan fuerte que sus compañeros aún no lo creen, todos los detalles a continuación. Sobre la boda : “Yo tenía clarísimo que necesitaba el mar a mi lado y que quería hacerlo de esta manera. Surgió, me dejé llevar y todo fluyó. No tomé decisiones de ningún tipo ni organicé nada, sólo quería estar al lado de la persona que quería. Todo fue cogiendo forma dos semanas antes, con el encargo del traje. De verdad que no tenía nada planificado pero ha sido todo maravilloso. Llegué aquí y coincidió que podían hacer lo que yo siempre había soñado. Me dijeron que me dejara llevar, que lo dejara fluir y fluyó. No imaginé que Sri Lanka iba a ser tan especial”, concluyó María agradeciendo a su esposo el venezolano Ricardo Rodríguez por haber hecho realidad su boda de ensueño con todos los detalles. El enlace no tiene validez en España Este enlace añ mp ser formal en Sri Lanka tampoco lo es en España pues tendría que pedir un certificado en Sri Lanka y formalizarlo en nuestro país. La colaboradora de Sálvame echó en falta a sus padres, tristemente fallecidos: “No les tenía, pero la ausencia significa que te los puedes llevar contigo a donde quieras. Es mejor tenerlos vivos, claro, pero yo me sentí muy acompañada”, ha dicho María. ¡Qué seas muy feliz, compañera! Detalles de su vestido de boda soñado, su luna de miel y el hotel Diseño de Ion Fiz La periodista tenía en mente el vestido de novia que quería llevar en su enlace. Escogió a su amigo el afamado diseñador Ion Fiz para crearlo en menos de dos semanas. Se trata de un vestido mini de corte sirena, falda entubada, tirantes y escote muy pronunciado, en mikado en seda de color crudo, sobre el que se superpone una falda a capa hecha con cinco capas de tul y una de organza. Patiño en el resort Patiño y Ricardo han elegido para hospedarse y darse el ‘sí, quiero’, y es que su boda tuvo lugar en el Surf Camp Sri Lanka, un hotel boho chic ubicado en el sur del país. Allí ha podido practicar entre otras actividades surf y yoga. Todas las habitaciones de este resort, diseñadas pensando en la sostenibilidad ecológica, están a pie de playa pese a que su precio no supera los 110 euros por noche.