La gala de Supervivientes arranca con mucha fuerza. Jorge Javier le dice a los concursantes que deben recoger todas sus pertenencias en cuatro minutos porque se cambian de isla. A partir de esta noche, cambia el escenario y cambian las condiciones. La mitad de los concursantes se irán a Cayo Paloma, donde gozarán de buenas condiciones, y la otra mitad irán a Playa Cabeza de León. Además, en los primeros momentos de Supervivientes también se produce otro momento muy esperado. Se produce la reconciliación entre Dakota y Jorge Javier, quienes tuvieron un desencuentro la semana pasada. Ambos se han pedido perdón y parece que la historia se soluciona así. Para decidir que equipo se va a cada una de las nuevas localizaciones los concursantes tendrán que medir sus fuerzas y su resistencia en la prueba del pulpo. Se baten en duelo de dos en dos, y quizás la batalla más reñida y más emocionante sea la de Albert y Fabio. La gana el primero. Como también la ganan Mónica y Omar, el equipo de los "no tan jóvenes" se irá a Cayo Paloma. En ese momento además Jorge Javier anuncia quien de los tres nominados se salva y puede continuar en Supervivientes. La audiencia salva a Albert, así que Carlos Lozano y Chelo se lo juegan todo a una carta. Recordamos que la cuarta nominada era Isabel Pantoja pero fue salvada por la audiencia el domingo pasado. Jorge Javier hace un repaso también del culebrón más mediático de esta edición de Supervivientes, que es la relación entre Fabio y Violeta. Estos, se habían enfadado, y por fin se han reconciliado y sellan su amor con un beso lleno de pasión. Entre los apoyos con los que ha contado Violeta esta semana ha sido el de Isabel Pantoja el que más le ha ayudado. En una noche llena de emociones, la decisión final de la expulsión se decide entre Chelo y Carlos Lozano. Y el público expulsa a Carlos.