Tras la visita de Kiko Jiménez a Estela, ésta continúa en el búnker y charla con Carlos Sobera. Estela insiste en que en Gran Hermano los sentimientos se multiplican pero para ella todo ha sido una amistad y le gustaría pensar que todo el mundo lo haya visto igual.

Apenas ha charlado un minuto, cuando le ponen un montaje con los vídeos en los que Sofía Suescun se derrumba por culpa del acercamiento entre ella y su novio. Estela no da crédito, está nerviosísima. Le parece todo muy excesivo pero en todo caso pide perdón a Sofía porque no le gusta verla así, ni ser la causante de su dolor.

Cuando está tratando de calmarse, Sofía Suescun entra por la puerta. Hablan con calma. Aunque Sofía dice que no la quiere desestabilizar porque lleva muchos días encerrada, lo cierto es que es muy malvada. Por una parte intenta forzarla a una confesión que como Estela dice no va a llegar nunca. No va a decir que tiene unos sentimientos hacia alguien que no tiene. Es decir, no siente por Kiko nada más que amistad.

Sofía Suescun entra a Gran Hermano para desestabilizar a Estela

Sofía Suescun entra a Gran Hermano para desestabilizar a Estela

Pero Sofía vuelve a la carga. Le pregunta qué pasaría si ella fuese la que está fuera y su marido Kiko está dentro y actúa como ella. Estela dice que no lo sabe, pero trataría de ponerse en su lugar. A buen seguro no montaría el circo que ha montado ella, eso está claro. De hecho, Estela insiste en que nunca ha tenido dudas, pero ahora que la final de Gran Hermano está cerca y está haciendo balance lo tiene más claro. Le gusta su vida de fuera, y quiere recuperarla en el mismo lugar y punto que cuando la dejó en septiembre.

Cuando Sofía se da cuenta de que no va a conseguir lo que quiere, trata de desestabilizarla de otra manera. Le dice que no está entendiendo su concurso que su paso por Gran Hermano está siendo muy tibio. ¿Es necesario hacerle pasar a Estela por este trance? ¿Es necesario dejar que la desestabilicen tanto cuando más hundida está? En todo caso, como ocurre a veces, las personas se crecen en la adversidad, y este parece ser el caso de Estela.