En el resumen diario de Gran Hermano vemos el análisis de la gala que hacen las finalistas. Alba es la que más contenta sale de la citada gala. Al dibujo de su hijo Lucas y al mensaje de su madre, Alba le suma una sorpresa inesperada. El mensaje de su chico Santi Burgoa.

Aunque Alba no ha querido mencionarlo mucho pues sabe que a él no le gustan este tipo de programas, ha hablado de él en varias ocasiones. Sin embargo, no ha sido hasta esta gala en la que él también ha decidido exponerse y decirle que la echa de menos, que Alba no se ha sentido libre para hablar de él. Tras la gala, le cuenta a Adara que lo conoció en el set de maquillaje de Mediaset y todo lo que le gusta de él.

La que no está tan contenta con la gala y los mensajes es Mila. Al parecer esperaba un mensaje más largo de su hija o algo con más contenido. Noemí le pregunta si está enfadada porque Anabel Pantoja aludiera a una traición en su programa. Adara le dice, que no se preocupe, pues a Gran Hermano como mucho le queda una semana y media.

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Noemí tampoco está especialmente feliz. También le hizo ilusión el dibujo de su hija y el mensaje de Antón. Incluso, la vuelta de su amigo el Cejas a Gran Hermano, aunque sea como su defensor. Pero Noemí dice que echó de menos las palabras de su madre. La echa mucho de menos, y sospecha que pueda estar pasando algo. Recordemos que Raquel Salazar sufre depresión, y quizás su hija crea que esta ha recaído.

Lo cierto es que la propia Mila hace balance de lo que significa permanecer en la casa de Gran Hermano estos días. Están felices por haber llegado a la final, pero a la vez están tan cansadas que los mensajes de sus familiares, aunque sean positivos, su mente los convierte en negativos.