Sálvame se ha puesto en contacto con Hugo Sierra tras los últimos acontecimientos en la casa de Gran Hermano. El uruguayo ha dicho que no estaba viendo la televisión, en ese momento. Y en todo caso, le ha dicho rotundo a Kiko Hernández que no tenía ganas de hablar. Y no es para menos. El vaivén emocional al que está sometido Hugo Sierra desde la entrada de su pareja en el reality de Telecinco es para volverse loco. Si hace un mes, Hugo estaba tan derrotado que decía emprender acciones legales para cubrirse en la custodia de su hijo hace una semana la retiraba. La visita que hacía a la casa de Gran Hermano la semana pasada, le daba un empujón de esperanza. Como los colaboradores de Sálvame han comentado, a pesar de que no todo estaba cerrado, Hugo salió fortalecido de ese encuentro. Al contrario, su rival, Gianmarco salía cabizbajo y con ganas de tirar la toalla, pues no entendía nada de lo que estaba pasando. Se encontraba con una Adara mucho más fría de la que había dejado cuando fue expulsado de Guadalix por la audiencia. Sin embargo, a lo largo de la semana, parece que Adara se habría arrepentido de todo. Del beso a Hugo - según la madrileña, ella solo le correspondió, pues le parecía feo apartarse. Pero también se arrepintió de no haberle pedido a Gianmarco que le esperara. Sin embargo, con la visita sorpresa recibida ayer, la madrileña ha podido decirle personalmente a Gianmarco que no le ha olvidado. Bueno, eso y mucho más. Los colaboradores de Sálvame han analizado la intensa noche que han pasado ambos, en los que hubo besos, caricias y declaración de intenciones. Veremos que pasa en la gala de hoy, pero desde el plató de Sálvame, los colaboradores entienden que a Hugo Sierra hoy no le apetezca hablar.