First Dates, la desconcertante cita de Cacao, que se denomina un profeta

El primer comensal que llega al restaurante de First Dates es Pedro, al que apodan Cacao. El mismo dice que se considera un chico diferente. En realidad, sus palabras textuales es que se considera un semi Dios y un profeta. La mirada de Carlos Sobera lo dice todo. Su cita es con Esperanza, una chica de Málaga que ni fuma ni bebe. La cita es totalmente desconcertante por culpa de Cacao. Esperanza no entiende nada. Y por ello no repite.

Muy distinta es la siguiente pareja de First Dates. Juan Ramón, viudo de 66 años que busca a una mujer divertida con una chispa de locura. Loli, divorciada de 64 años, a la que le encanta bailar y cantar. Le gusta ir a un karaoke los fines de semana. Sus experiencias vitales son bastante distintas, y habrá que ver si ambos están dispuestos a hacerlas coincidir. Parece que él si estaría dispuesto, pero ella no ha sentido chispa.

A continuación llega a First Dates Carlos, un chico que ha cambiado radicalmente su físico en los últimos años, pues tenía sobrepeso y ha adelgazado mucho. Su cita, Rosario, busca a alguien sencillo y que no sea superficial. Carlos es extrovertido y Rosario más tímida, pero se complementan bastante bien. Repiten.

Ángela es una persona a la que en principio no le cuesta ligar, pero es bastante exigente, y busca más la calidad que la cantidad. Manuel acude a First Dates para encontrar a alguien que le de estabilidad en el amor. Manuel ha tenido muy malas experiencias en las relaciones anteriores relacionadas con la infidelidad. Él, sin embargo es cariñoso y romántico. Repiten.

Cristina cree que el problema de los hombres es que no quieren comprometerse. Cenará con Agustín que tiene una hija de un mes. Esa noticia impacta a Cristina pero el resto de la cita transcurre muy bien. Se gustan mucho y repiten sin duda.

La última pareja que cenará en el restaurante de First Dates son Paco y María José. Cenan de milagro. Desde el principio a María José el físico de Paco la desconcierta y casi se levantan de la mesa. Al final, Carlos les convence de que cenen sin ningún compromiso, y eso hacen pero tan sólo aguantan el primer plato. María José ha sido bastante mal educada y a Paco le ha dolido.

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