Los hermanos Peña han vuelto a la Brigada Costa del Sol para dejar claro que ellos tienen el monopolio del narcotráfico en Torremolinos. Desde su vuelta se dedican a arrasar todos los negocios que pretenden vender droga sin pasar por su negocio. Eso a Reyes lejos de gustarle, le asusta y empezará a buscar cómo quitarse a los Peña de encima. Además, el padre de Leo interviene para sacar a su hermano de la cárcel, humillando a la vez a Leo, pues le echa en cara su escaso compromiso con España. Respecto a la historia de amor de Brigada Costa del Sol, Bruno corta con Buhita. En realidad lo hace por alejarla del peligro, pero esta se lo toma muy mal, especialmente cuando se entera de que está casado. Además, Yolanda también está cabreada con Leo porque éste no le ha dicho que Bruno estaba casado. El le dice que lo ha hecho por lealtad hacia su compañero. Yolanda se queda muy triste y decepcionada por la ruptura, pero eso le da vía libre para seguir con su plan de venganza contra los Peña. Además, le echa en cara a su tío Reyes que esté trabajando con los asesinos de su padre. Él, la engaña y dice que ellos le están chantajeando y que no puede hacer nada. Le pide que le informe sobre cualquier cosa rara que vea en la discoteca o en el pueblo. Precisamente, cuando ella se pone a investigar da con la casa de los Peña. Entra con una navaja y se encuentra allí con Cristo Peña que pronto la descubre. Se genera un tira y afloja entre ambos que se salda con la muerte del delincuente justo en el momento en el que Bruno, alertado por Chino irrumpe en la casa. El policía lo organiza todo para que la muerte de Cristo no salpique a Yolanda y a la vez aprovecha para quitarse de encima a Chino.