Matadero no alcanza las audiencias del inicio pero se mantiene estable frente a los altibajos de otras cadenas. Además, ha hecho frente con fuerza al estreno de una nueva serie en Telecinco.
El capítulo de esta semana comienza a girar la trama hacia un desenlace cada vez mas cercano en el que puede pasar de todo. Matadero se acerca al final.
Por una parte, los portugueses quieren venganza por la muerte de Montaña. Salvador, consciente de que su hija puede estar en el punto de mira, decide controlarla y encerrarla, pero no será suficiente puesto que esta ya ha caído bajo las redes de Vasco. Cristina intentará salvar a su hija del juego del portugués. Pero es demasiado tarde, porque el portugués las ha secuestrado.
Almudena y Alfonso continúan discutiendo por la avaricia de ella. Don Julio le ha ofrecido una suma alta de dinero si fabrica veinte kilos de Sal del Himalaya. Ella, cree que ese dinero le servirá para ser feliz. Especialmente para conseguir su sueño de ser madre. En este sentido, no duda en tratar de sobornar al comité que decide sobre las adopciones. Precisamente, tras la negativa de estos a continuar con los trámites de adopción, una Almudena derrotada, caerá en los brazos de Pascual. Éste la consuela, y finalmente dan rienda suelta a la pasión.
Además, Alfonso llega tarde al examen de oposición, y está abatido por no poder conseguir su sueño de ser funcionario. Quizás este sea el momento, en el que su personaje gire, a partir de la frustración. Quizás ahora podamos ver a un Alfonso más proclive a los desmanes de su cuñada.

Matadero

María se lleva a Salvador a declarar a la comisaría.


María continúa con la investigación citando a declarar a Salvador por el cuerpo de Montaña, marcado con crotales de cerdo. Además, a partir de una investigación ilegal en casa de sus tíos, María y Jacobo encontrarán cocaína, lo que confirma que Francisco no se ha ido por amor.