«Tuve adicción a las drogas y lo pasé muy mal«, esta fue la frase de Kiko Rivera en GH DÚO. No consiguió ganar, pero ahora tiene a su madre con un gran temor en el corazón.

En esta ocasión, lo que le preocupa  a la tonadillera no es la mala relación que hay entre Kiko Rivera e Isa Pantoja. Por si no lo sabías, estos tienen una gran enemistad, pero desde antes de que comenzara la edición de Supervivientes en la que participó su madre. No parece que la situación entre ambos vaya a mejorar, ya que Kiko Rivera está haciendo méritos para que esto continúe de esta forma.

Y es que a pesar de que sabe que su hermana no quiere ver a Omar Montes, su ex novio, Kiko Rivera lo invitó a la fiesta de cumpleaños de su madre en Cantora. Eso sí, de manera sorpresa, para que no hubiera forma de impedir que este apareciera por allí.

Pero ahora la tonadillera e Irene Rosales están preocupadas por un asunto mucho más grave, que parece que el Dj no piensas valorar.

Kiko Rivera preocupa a Isabel Pantoja

Recientemente nos ha llegado la noticia de que Kiko Rivera había abierto su propia discoteca en Sevilla. Aunque te parezca una noticia inocente, resulta ser más preocupante de lo que aparenta. Como ya confesó en su paso por la casa de Guadalix, el Dj tuvo problemas con las drogas y el alcohol.

Esto fue lo que provocó sus problemas financieros, y por extensión, también afectó a su familia. Pero parece que no ha aprendido la lección después de todas las charlas que con él se han tenido. Cuando están en proceso de recuperación, lo peor que puedes hacer es volver a acercarte a este mundo, lo cual ha hecho sin dudarlo dos veces.

«El público y el ambiente es bastante poco recomendado para alguien que está en pleno proceso de recuperación«. Para colmo, Kiko Rivera ha estado algo irascible en su casa, lo que ha dificultado la relación con su mujer, Irene Rosales. Esta ha sido la primera afectada ante la decisión de su marido, así que solo queda esperar a ver cómo se desarrollarán los acontecimientos.

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