El gran salto como princesa de Leonor para ser la heredera al trono de España será el próximo 18 de octubre en Oviedo. Hasta ahora, las hermanas Sofía y Leonor siempre se han mostrado como iguales. El acto celebrado en Oviedo, va más allá de lo institucional. Ya que supondrá un gran cambio en la vida de la niña de 13 años, además de para su hermana menor, la infanta Sofía. Ambas hermanas siempre han sido tratadas como iguales dentro del hogar, y cuando en un acto Leonor debía sobresalir, su madre, la reina Letizia siempre estaba más atenta a Sofía, para que esta no se sintiera apartada. Aunque las hermanas siempre vayan de la mano, sus responsabilidades con la corona están a punto de comenzar a separarlas. Leonor debe llevar una preparación muy dura para su futuro papel como reina, lo que la llevará por un camino muy distinto al de su inseparable hermana, Sofía. Sofía un paso por detrás Aunque los reyes siempre han querido la igualdad para sus hijas, la corona pesa más. Lo que sacará a las jóvenes de su infancia, y comenzando así a hacerse cargo de sus responsabilidades como princesa e infanta. Hace unos meses que los reyes comenzaron a reforzar el papel público de su primogénita, debido a su futuro cada vez más cercano. Esto deja por detrás a Sofía, quien incluso en estado físico siempre aparece un paso por detrás de su hermana, tal como lo dicta el protocolo. El carácter de la pequeña de la familia real es mucho más explosivo que el de su hermana Leonor, quien se muestra mucho más enigmática. Sofía es más abierta y habladora, lo que demuestra que su personalidad tiene mucho que ver con la de su madre. Ahora que Leonor tiene su futuro marcado, Sofía debe saber que ella podrá llevar una vida mucho más discreta si lo desea, incluso puede trabajar fuera de la Casa Real.