La presentadora malagueña Terelu Campos ha querido hacer público una situación que tuvo que sufrir hace algunos años. La presentadora fue víctima de un acosador a través de llamadas telefónicas. Por ello, ha decidido hablar, pues no es la única que ha vivido esta terrible situación. La semana pasada, Irene Rosales, mujer de Kiko Rivera, estuvo recibiendo unos mensajes muy desagradables. Y es que la colaboradora de Viva la Vida ha sido víctima de un acosador que le estuvo mandando unos mensajes muy repulsivos a través de su correo profesional. Ante esta situación, Irene Rosales ya ha contestado poniéndolo todo en conocimiento de la policía. Las constantes amenazas a Terelu Campos Al principio fueron mensajes de texto, pero después empezó a acosarla a través de llamadas telefónicas. Terelu Campos recuerda esos momentos con mucha angustia y a pesar de que ocurrieron ya hace algunos años, siente miedo de que pueda volver a pasar. “Me decía que me iba a espesar a las puertas de Telecinco para violarme, que le daba igual que lo metieran en la cárcel porque le merecería la pena”, explicaba la colaboradora. Por desgracia la periodista tuvo que vivir y sufrir esta situación durante varios años. Ante esta situación, Terelu también puso en conocimiento de la policía estos hechos, pero desgraciadamente nunca dieron con esta persona. Estas amenazas hacia Terelu eran constantes. Incluso hubo alguna vez que el acosador se atrevió a mencionar a Alejandra, hija de la colaboradora y menor de edad durante esos momentos. “Me dijo que un día no me había pasado nada porque iba con mi hija”, explicaba la malagueña. Desde que puso estos hechos en conocimiento de las autoridades, le aconsejaron que no contestara el teléfono. Pero un día cansada de estas amenazas, contestó al acosador, “Te sorprendería saber que sé quién eres”. Terelu nunca había querido hacer público estos hechos, pero tras la situación que vivió Irene Rosales, decidió denunciarlo y así dar fuerzas a otras mujeres que se encuentren en la misma situación para que puedan denunciar sin miedo.