Hace un año que la influencer Rocío Osorno y Jacobo Robatto se comprometieron en la ciudad de Brujas. Desde aquel día, comenzaron los que parecían unos interminables preparativos para el día más especial de su vida.

Después de un año de preparativos, la boda de Rocío Osorno y Coco, como le llaman cariñosamente, ha llegado. El día del 29 de junio ha sido la fecha elegida por la pareja para dar su ‘Sí, quiero’. Y el lugar ha sido de lo más especial, al igual que hace dos semanas Pilar Rubio, la pareja ha elegido la Catedral de Sevilla para la ceremonia religiosa. Este ha sido el lugar donde han puesto el broche de oro, a una relación que lleva cuatro años a sus espaldas.

La fashion instagramer se ha enfrentado al mayor reto de su vida, pues no es lo mismo tener que diseñar un vestido de novia para una clienta, que para ti misma. Finalmente, ha sido afín a su estilo propio.

Rocío Osorno diseña su propio vestido de novia

El vestido ha sido todo un reto, ha optado por un elegante y sencillo diseño en blanco, con manga larga y un ligero escote con corte barco. El cuerpo ha sido ajustado a su cintura, con una larga cola y la espalda al descubierto. Para rematar este look tan propio, y hacerlo algo más original, ha llevado un tocado de pedrería del que salía su velo.

Aunque el gran protagonista ha sido su hijo, a quien suelen referirse como Jacobito. Este nació el pasado noviembre, y desde entonces Rocío Osorno ve su vida completa. «Todo lo que necesito lo tengo en mis brazos. Es la personita más importante de nuestras vidas«. Este fue el mensaje que publicó en sus redes sociales, unos días después de haberlo traído al mundo.